Una nena sufrió graves quemaduras tras un nuevo accidente con un experimento en una escuela de San Juan

Una nena de 10 años sufrió graves heridas por quemaduras tras un nuevo accidente con un experimento escolar en San Juan. El hecho ocurrió el martes y reavivó la preocupación nacional, ya que se suma a los casos recientes en Pergamino y Palermo.
El incidente se originó durante una exposición de una maqueta que utilizaba alcohol como parte del experimento, según informaron fuentes judiciales a Tiempo San Juan. La reacción química generó una llamarada repentina que alcanzó a la menor y le provocó quemaduras en el rostro, el cuello y el torso.
En un aula colmada de estudiantes, padres y docentes, el incendio desató escenas de pánico, mientras se esperaba a los Bomberos. Tras recibir las primeras atenciones en el lugar, la niña fue trasladada en ambulancia al Hospital Marcial Quiroga y, debido a la gravedad de sus lesiones, derivada posteriormente al Hospital Rawson, donde permanece en terapia intensiva, intubada y bajo observación permanente.
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Los profesionales médicos determinaron que la víctima sufrió quemaduras de grado A y B, lo que afectó el 10% de su cuerpo y complicando incluso sus vías respiratorias. Frente al riesgo de infecciones y complicaciones pulmonares, el diagnóstico requiere de intervenciones especializada y un monitoreo constante.
La pequeña continúa bajo sedación y su evolución es seguida de cerca, mientras familiares y allegados lanzan mensajes públicos de apoyo y piden justicia por lo sucedido.
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En paralelo, se iniciaron supervisiones en el establecimiento para iniciar una investigación administrativa interna y determinar posibles responsabilidades del personal docente. Sin embargo, desde la Unidad Fiscal de Delitos Especiales trascendió que, tras las primeras tareas investigativas y la recolección de testimonios, se estableció que el accidente habría sido provocado por la travesura de un compañerito.
La hipótesis descarta la imputabilidad penal de funcionarios escolares, pese a que la investigación oficial continúa para evaluar eventuales irregularidades administrativas o carencias en la supervisión adulta durante la actividad.
La madre de la niña, Evelin Cabrera, reclamó una mayor supervisión docente y apuntó contra la escuela por falta de información sobre lo ocurrido. “La maestra nunca avisó que ellos iban a presenciar esta exposición”, sostuvo. Y añadió: “Espero justicia por mi hija, ella no merece estar sufriendo por negligencia de la escuela”.
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El hecho se suma al que ocurrió el pasado 9 de octubre durante una exposición de ciencias en una escuela de Pergamino, cuando una explosión dejó como saldo más de una decena de heridos. La más afectada entre los heridos fue la niña que pasó 20 días internada en el Hospital Garrahan, luego de sufrir un traumatismo craneofacial severo.
A la semana, el 15 de octubre, cuatro menores de edad fueron atendidas de emergencia por el SAME luego de que sufrieran heridas de distintos grados durante un experimento realizado en una clase de química en una escuela del barrio porteño de Palermo. Los heridos presentaban quemaduras en la cara y en el pecho.
BGD/ML
