“Tanques de la paz”: Alfredo Segatori transforma chatarra en esculturas

Luego de dejar su colorida impronta artística en los muros y paredes de la Ciudad de Buenos Aires, además de otras ciudades del país y del mundo, crear la serie de arte abstracto Exabrupto de color y realizar diferentes homenajes artísticos a personalidades como Diego Armando Maradona o a la Selección Nacional después de conquistar Qatar 2022, entre otros, el reconocido muralista urbano Alfredo “el Pelado” Segatori decidió incursionar en la escultura pesada.
Apenas fue convocado desde el municipio de Avellaneda y le propusieron crear esculturas con los restos de vehículos incautados que estaban destinados a la compactación, no dudó un instante en aceptar el desafío que le proponían.
Por medio de una iniciativa impulsada por la Secretaría de Comunicación del municipio que encabeza Jorge Ferraresi y, a través del Refugio del Arte (ver aparte), Segatori construirá –y resignificará– dos tanques de guerra con chatarra, que serán exhibidas en el espacio público de aquella ciudad en el cual se combinarán el arte, el reciclado urbano y un mensaje de paz.
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“No soy indiferente a los tiempos que estamos viviendo, y trato de aportar desde el arte otra mirada a lo terrible que significa una guerra”, explicó el propietario del Bondi Gallery, especie de galería ambulante montada sobre un viejo Mercedes Benz 1114.
Las piezas, que pesan unas 50 toneladas cada una, conforman la serie “Tanques por la paz”. Según el muralista, una de ellas está realizada sobre un camión de basura dado vuelta, mientras que la otra está construída con los restos de una vieja usina eléctrica montada sobre ruedas de camiones y autos. En un gesto simbólico, desde los cañones de los tanques dispararán ramos de flores.
En su charla con PERFIL, Segatori reconoce la influencia de Carlos Regazzoni en el uso del metal pesado, aunque con su sello personal: una vez terminada, la obra será intervenida con su impronta “Exabrupto de color”, una explosión cromática que contrasta con la dureza de los materiales reciclados.
“Esta serie es la más grande y pesada a nivel escultórica de mi trayectoria. Tiene una impronta ‘regazzoniana’ si se quiere. Una vez terminada las pinto y les dejo mi sello de mi serie abstracta. Los Tanques por la paz fue una idea mía que fue aceptada sin problemas por el municipio. Es muy importante que el municipio respete la creatividad del artista y confíe en una propuesta personal”, destacó Segatori.
Las obras se construyen en el Ecopunto de Avellaneda, con la colaboración de soldadores, artistas locales y miembros del Refugio del Arte. Está previsto que se emplacen a fin de año en el cruce de la calle De Benedetti y la Au Ricardo Balbín, en un espacio público donde además se proyecta una bicisenda. “Todo depende del avance de obras de la Municipalidad en la zona, que calculo que será para fin de año. Los tanques estarán listos en un par de semanas. La idea también es hacer una intervención de colo en el bajo autopista”, señaló el muralista que homenajeó al Seleccionado nacional campeón del Mundo en Qatar 2022 con una bandera argentina de 400 m2 pintada sobre la rampa y escalinata de la calle Lavalle, entre 25 de Mayo y Alem, en pleno Bajo porteño.
En la Boca. En paralelo, el artista desarrolla un proyecto de recuperación cultural en las históricas cantinas de la Boca. Allí, a través de su Fundación Cultural Andén 2222, trabaja en la reapertura de espacios como la Cantina Rimini y el Piccolo Vapore, que funcionarán como centros culturales independientes. La propuesta incluye la restauración de murales de Vicente Walter, el reconocido escultor y muralista de La Boca, y nuevas intervenciones artísticas que dialogan con la tradición boquense.
La primera en abrir suspuertas fue Rímini, que fue convertida en la Galería Social Rímini, que se inauguró el pasado 23 de agosto con la exposición Súper Mínima en la que exhiben sus obras unos 600 artistas plásticos.
En este caso puntual, en la movida artística en Rímini también participó Paula Pons, quién además de ser la esposa del Pelado, es hija de uno de los dueños de la reconocida cantina de Suárez y Necochea.
Mientras tanto, también avanzan las obras en otra histórica cantina de la Boca, Il Piccolo Vapore. Que está declarada como bar notable, tiene una obra de Vicente Walter en su frente que será restaurada por el propio Segatori. “La idea es habilitar Piccolo Navío como un espacio de arte independiente.
Además de restaurar la obra de Vicente, voy a hacer un mural en la parte superior del frente que `dialogará’ con la obra de Vicente, que consiste en dos sirenas y el fondo del mar”.
Un refugio para el arte en Avellaneda
C.C.
Según explicó Alfredo Segatori, su convocatoria a generar obras de arte a partir de restos de autos abandonados en un playón partió desde la Secretaría de Comunicación a través del Refugio del Arte. Una propuesta cultural que se gestó en el partido de Avellaneda y tiene por objetivo ser un espacio para la producción y difusión artística del municipio.
El lugar se encuentra en un espacio recuperado por la Municipalidad de Avellaneda en el distrito de Wilde, donde ya funcionan un cine-teatro con aulas-taller, espacios de enseñanza, viviendas multifamiliares y equipamientos públicos para dependencias de la Policía y la Anses, se propone trasladar el Centro de Formación Profesional N° 404 y el Refugio del Arte Municipal.
El primero cuenta actualmente con 750 alumnos y 36 docentes y dicta múltiples talleres de oficios. El segundo representa un polo productivo que en esta nueva etapa buscará elaborar elementos urbanos a ser utilizados en las áreas públicas del distrito. Además, allí se dictarán múltiples talleres artísticos y ligados a los oficios de la construcción.
Los beneficiarios de estos nuevos equipamientos serán los vecinos de Avellaneda, Quilmes y Lanús a partir de 18 años de edad.
