Receta del bizcochuelo matero, esponjoso y fácil de hacer
El bizcochuelo casero se ha vuelto una de las recetas más clásicas, y la que todos deberían conocer. Esta versión que elegimos es ideal para quienes buscan uno alto, esponjoso y perfecto para combinarlo con mate, aunque cualquier infusión le queda bien.
Esta receta se diferencia de las otras porque utiliza aceite en lugar de manteca. Este ingrediente no solo lo hace más húmedo, sino que también resulta ser más económico y fácil de preparar.
Los ingredientes son sumamente fáciles y accesibles de conseguir. Necesitamos 3 huevos grandes, 1 taza de azúcar rubia o morena, 2 tazas de harina 0000, 1 taza de aceite neutro o de girasol, 1 cucharadita de polvo para hornear y 1 chorrito de esencia de vainilla.
Con estos ingredientes podrás hacer nuestra receta estrella. Para lograr la textura que buscamos, será fundamental batir bien los huevos con el azúcar, hasta obtener una mezcla cremosa y con burbujitas. Esto le dará esponjosidad al bizcochuelo.
Una vez que tengamos la mezcla, que veas que creció, se agregará la taza de aceite y el chorrito de vainilla. Luego, después de tamizar, añadir la harina con la cucharadita de polvo de hornear. Mezclar con movimientos envolventes.
En caso que la mezcla haya quedado muy espesa, la alternativa de esta receta es agregarle un chorrito de leche. La clave será buscar el equilibrio perfecto, ni muy espesa, ni muy líquida, ya que esto será fundamental para que salga perfecto.
Los últimos pasos
Se vierte la mezcla en un molde, previamente enmantecado o con papel vegetal. Llevarlo a un horno, precalentado a 180 grados, por 40 minutos o hasta que veas que se ha cocido por dentro.
Para saber si está listo, el consejo que te damos en esta receta es tomar un palillo e introducirlo en el centro del bizcochuelo. Si sale seco es porque está listo. Enfriar y desmoldar. Decorar con lo que más te guste.
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