La interna de la familia Tinelli sigue arrojando nuevos y controversiales episodios, algunos más confusos que otros. La denuncia que Juanita Tinelli presentó por amenazas de muerte parecía marchar a su ritmo, pero en las últimas horas surgió un punto que puede cambiarlo todo. El clima se encuentra enrarecido dentro de la Fiscalía Penal, Contravencional y de Faltas N°6, y Mauro Szeta dio detalles fuertes alrededor del caso.

Luego de que Juanita expusiera su versión de los hechos, su papá, Marcelo Tinelli, se presentó a declarar de manera presencial. Sin embargo, el periodista de policiales reveló algo que dejó una sensación inesperada: la causa podría no tener el recorrido que muchos imaginaban.

Según precisó Szeta, la presencia de Marcelo en sede judicial fue extensa. “En el marco de la causa que investiga las supuestas amenazas, declaró de forma presencial Tinelli, lo hizo en el día de ayer -precisó el periodista-. Prestó declaración en carácter de testigo durante cuarenta y cinco minutos. Él confirmó que el día de los hechos Juanita se comunicó con él para decirle que había recibido una llamada con una amenaza, y dio un relato similar al de su hija”.

Hasta ese punto, todo parecía fluir dentro de la lógica de una investigación que recién empieza. Pero Szeta remarcó un obstáculo que preocupa a los investigadores: el teléfono de Juanita nunca fue aportado. ¿Cuál es el inconveniente? ¿Por qué el dispositivo no se encuentra ya en manos de la Justicia?

MAURO SZETA REVELÓ LA POLÉMICA ACTITUD DE JUANITA TINELLI ANTE LA FISCALÍA

“El principal problema de la causa es que tenían todo preparado para poder peritar el teléfono de Juana y ella todavía no lo aportó y, además, ayer les quedó la sensación de que no lo va a dar Eso puede significar que tenés miedo, que no tenés interés en que avance la investigación o que no querés que revisen todo y salgan cosas personales”, explicó el periodista.

Por otro lado, Mauro contó que Juanita dice haber borrado aquella llamada donde la amenazan, algo que no termina de cerrar demasiado para algunos. “A mí me reconfirman que ella borró la llamada, pero otro dato fundamental acá es que le preguntan a Tinelli si tiene miedo, y él contesta que por él no. Explicó que no tiene idea del origen de la llamada”, contó.

Este punto es clave: sin el celular de Juanita, la fiscalía se queda sin la pieza central que permitiría rastrear el origen de la amenaza. Sin ese peritaje, la causa prácticamente se queda sin aire. Y eso fue justamente lo que el periodista dejó entrever al analizar la situación.

“Mi percepción, después de haber hablado con varios protagonistas de la historia, no deja de llamarle la atención al fiscal que Juana no aporte el teléfono, ella está en su derecho, pero si no hay un aporte nuevo esto va camino al archivo. Si no tienen un elemento pericial para investigar de dónde vino la supuesta amenaza, el fiscal está atado de manos, no tiene herramientas. Con lo cual me dicen que, si no cambia nada, va a archivo”, concluyó Szeta.