En la tarde de este martes se vivió una vibrante cuarta jornada de Champions League, y una de las goleadas más destacadas fue la del Tottenham, que aplastó 4-0 al FC Copenhague de Dinamarca.

Más allá de la sorprendente paliza de los Spurs de Cristian Cuti Romero, todas las cámaras se centraron en el golazo del defensor neerlandés Micky Van de Ven, que dejó a todos los fanáticos del fútbol boquiabiertos.

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Cuando el partido ya iba 2-0 a favor de los londinenses, ocurrió una locura que paralizó a todo el Tottenham Hotspur Stadium: el central se corrió la cancha de punta a punta y anotó un sorprendente tanto que en las redes ya catalogan como el «Gol del Año».

El reloj marcaba los 64 minutos del segundo tiempo y todo ocurrió en un lapso de segundos: Van de Ven recuperó en su propio campo, inició una cabalgata imparable y superó a todos los rivales que tenía en su camino.

Una corrida de más de 60 metros, llena de regates y velocidad, rompió la línea defensiva hasta llegar al área rival, donde, como si fuera un delantero, definió con frialdad y un zurdazo magnífico, estampando el 3-0 parcial.

Como era de esperarse, todos sus compañeros fueron a abrazar al central tras haber marcado lo que, en unos meses, podría ser el gol ganador del premio Puskás, que se otorga al mejor tanto de la temporada.

FMZ