Lula Da Silva dijo que los narcotraficantes son «victimas de los usuarios»
En medio de una grave crisis política y de seguridad que tiene lugar en Brasil, tras el golpe policial al Comando Vermelho en Río de Janeiro, el presidente de ese país, Lula Da Silva, lanzó una curiosa afirmación que parece deslindar a los narcotraficantes de su responsabilidad como líderes de organizaciones criminales.
En declaraciones a un medio de comunicación, el mandatario brasileño afirmó que “los traficantes son víctimas de los usuarios”.
“Los traficantes son víctimas de los usuarios”.
– La extraña alusión de Luis Lula Da Silva al papel de los traficantes de droga. pic.twitter.com/W3i5hQg79n
— Los Herederos de Alberdi (@LHDA16) November 1, 2025
Se trata de un llamativo posicionamiento ante un problema endémico que atraviesa ese país, en donde grupos criminales como el Comando Vermelho acaparan un gran poder territorial en las ciudades, como se puso de manifiesto en el sangriento operativo policial acontecido esta semana en Río de Janeiro.
En ese marco, según el esquema de Lula Da Silva, los consumidores de drogas se equiparan a los narcotraficantes en cuanto a responsabilidades, lo que se ajusta a la regla capitalista de la oferta y la demanda.
La polémica declaración del mandatario fue realizada en el marco de su gira por Indonesia, donde brindó su punto de vista sobre políticas para combatir el narcotráfico.
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Allí dijo que confrontar con los narcotraficantes sería más fácil si también, por medio de políticas del cuidado, se previene y reduce el consumo de la droga que ofrecen. Un achicamiento del mercado que a su vez achique los recursos de las organizaciones criminales.
Pero las políticas del cuidado se ven desbordadas por una realidad precaria que empuja a la consolidación del consumo de drogas, lo que deriva en un fortalecimiento de las bandas criminales frente al poder de un Estado que suele ser permeado por estas.
Con esta postura garantista, el actual presidente se proyecta hacia la competencia por un segundo mandato consecutivo en medio de una confrontación abierta entre uno de los principales Estados federales, el de Río de Janeiro, y el crimen organizado, que podría extenderse a otros lugares de Brasil si no tiene lugar una mayor intervención federal.
