El intendente de Mina Clavero, Luis Quiroga, volvió a encender el debate sobre el lugar que ocupa el interior en la UCR cordobesa. Su diagnóstico es crudo: el partido lleva décadas sin un proyecto colectivo que ordene aspiraciones y otorgue protagonismo real a quienes hacen política lejos de la capital.

El aeropuerto Córdoba contará con kioscos de autoservicio para check in y despacho de equipajes

En el programa AfterOffice, de Radio Punto a Punto (90.7), Quiroga analizó la escena provincial donde figuran tempranamente Rodrigo de Loredo, Luis Juez y Gabriel Bornoroni. Más allá de los nombres, insistió en que el radicalismo primero debe resolver sus tensiones internas. Y fue categórico: “Muchas veces nos convocan tarde, para oficiar de pseudoescribanos de decisiones que ya vienen tomadas”. Para el intendente, ese destrato histórico vuelve estéril cualquier aspiración individual.

También cuestionó la escasa presencia de dirigentes históricos en la última elección legislativa y repasó episodios de tensión con la conducción partidaria: “El cargo por el cargo no me interesa. Recuperamos Mina Clavero después de 12 años y nunca recibimos la visita del Comité Provincia. Lo que pedimos es respeto y participación real”.

Mercado Libre creará 400 nuevos empleos para Villa María y Río Cuarto

De cara al futuro, Quiroga fue claro: antes de pensar en alianzas externas, el radicalismo debe ordenar su propia casa. Eso implica dejar atrás mezquindades, abrir el juego y reconocer el peso territorial del interior. “Si no reconstruimos el partido desde adentro, vamos a seguir valiendo menos cada vez que haya que negociar”, advirtió.