Lali Espósito desató el infierno en “La Voz Argentina” con un look rojo furioso
En una noche cargada de talento, emoción y decisiones clave, Lali Espósito volvió a demostrar por qué es una de las figuras más magnéticas de la televisión argentina. El inicio de los Playoffs en La Voz Argentina no solo marcó una nueva etapa en el certamen musical de Telefe, sino también un nuevo hito en la estética del programa, gracias a la deslumbrante aparición de la cantante y actriz, que se robó todas las miradas con un imponente vestido rojo furioso.
Desde el primer minuto, Lali Espósito impuso su presencia con un look total red que combinó sensualidad, audacia y sofisticación. El vestido strapless, de cuello redondo en puntas, fue acompañado por una boa al tono, uñas largas en rojo intenso, gafas rojas, un teléfono vintage como accesorio y un maquillaje que incluía labios vibrantes en el mismo color.

Todo el conjunto fue una declaración de estilo y actitud. En su cuenta de Instagram, la artista compartió una imagen anticipando su aparición con la frase: “Hoy atendemos al demonio en los Playoffs”.
La publicación explotó en minutos con miles de comentarios y elogios, tanto de sus seguidores como de colegas del medio. Juliana Gattas, de Miranda!, fue una de las primeras en reaccionar, mientras que otros usuarios dejaron frases como “Qué mujerón”, “Ese rojo es tu color”, “Atendiste al demonio” y “Ni Miranda Priestly lo podría haber vestido mejor”.

El look de Lali no fue solo una elección estética, sino también una forma de comunicar. El rojo, color asociado al fuego, la pasión y la fuerza, se convirtió en símbolo de su liderazgo como coach en una etapa decisiva del certamen. Su presencia marcó un contraste con el resto del jurado, y volvió a posicionarla como referente de moda y empoderamiento en la televisión.
Además, el guiño al “demonio” no pasó desapercibido. Algunos lo interpretaron como una referencia a su último álbum, otros como una metáfora de la intensidad que se vive en los Playoffs, donde cada decisión puede cambiar el destino de los participantes.
El rol de coach: carisma y estrategia
Más allá del impacto visual, Lali Espósito brilló por su desempeño como coach. En esta primera gala de Playoffs, siete integrantes de su equipo se presentaron con canciones individuales, y la artista debió tomar una decisión clave: salvar a uno de ellos para que avance directamente a la siguiente ronda.
El elegido fue Valentino Rossi, un joven oriundo de Tigre, Buenos Aires, que interpretó “Don’t Stop Believin’” de Journey, popularizado por la serie Glee. Su performance fue sólida, emotiva y técnicamente impecable, lo que llevó a Lali a definir con firmeza: “La verdad es que estuvo espectacular, todos lo estuvieron, pero siento que este primer salvado lo merece”.
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