Tomás Machuca se llevó los aplausos al cautivar al público en Otro día perdido (El Trece) cuando contó su historia y cómo creó su emprendimiento logrando llevarle un regalo a Lionel Messi. 

¿Quién es Tomás Machuca, «el pibe de las canilleras»?

El joven de 23 años, cariñosamente llamado Tomi, se sentó en el sillón de Mario Pergolini para revelar el surgimiento de la venta de canilleras de fútbol realizadas a partir de tapitas plásticas. Desde hace algunos años, se convirtió en furor en la red al contar su historia y hoy la llevó a la pantalla chica. 

«Yo tengo una empresa hoy por hoy en la que hacemos canilleras de fútbol reciclando tapitas. Arrancó a mis 17 años cuando yo jugaba al fútbol con el sueño del pibe de mejorar la calidad de vida de mi familia y yo jugaba en un club de barrio de mi ciudad, Rosario, que se llama Tiro Suizo y en un entrenamiento me rompen mis canilleras«, comenzó relatando.

En ese momento, la desesperación fue tal que la idea que le brotó le terminó cambiando la vida: «Como mi casa no sobraba guita para que me compren otras, busqué cómo me podía hacer unas y agarré un balde de pintura, cansado de ser orinado por mi perro, lo rescaté le saqué una sierra a mi papá, un secador de pelo a mi abuela para moldearlo y me fui a un ciber para hacer un diseño con imágenes de mi familia en Paint que lo imprimí en papel para pegárselo. Al otro partido, voy al club, lo de mis compañeros y me dicen ‘de dónde las sacaste, están buenísimas’. Yo les empecé a decir ‘las vende un tío que vive en Buenos Aires’«.

Así es que empezó a vender a pequeña escala las canilleras, hasta convertirse en un visionario. Actualmente, «son flexibles, se adaptan a la pierna y la impresión está hecha con impresión LED». 

Creció tanto su empresa que, meses atrás, logró entregarle este objeto personalizado a Lionel Messi en una fecha FIFA que se disputó en la Argentina, habiéndose hecho viral la sorpresiva reacción del astro argentino.

Luego de darse a conocer su historia, en la red todos enloquecieron y los comentarios positivos comenzaron a llover: 

• «Una alegría verlo, educado, sencillo, con ganas de hacer cosas, una alegría que muestren que esta juventud también existe, me encantó la nota».
• «Me quedé fascinada con este chico, su madurez, su instinto de supervivencia, su conocimiento del entorno, su respeto hacia su familia, su todo. ¡Orgullo es tener argentinos así!»
• «Un campeón de la vida, creativo, por más genios así»
• «Llenen Argentina de pibes así. El laburo y el ingenio. Las ganas de hacer».