La difícil decisión de Soledad Pastorutti, luego de llorar en vivo en “La Voz Argentina”
La segunda ronda de La Voz Argentina 2025 comenzó con una noche cargada de sensibilidad, talento y momentos inolvidables para Soledad Pastorutti. En la fase conocida como “ronda de batallas”, los participantes seleccionados por cada coach se enfrentan en duelos musicales que definen quién continúa en competencia.
En este contexto, el equipo de Soledad Pastorutti presentó una de las actuaciones más conmovedoras de la temporada: Oscar Burgos Espinoza y Rogelio Posat interpretaron el clásico tango “Cuando un amigo se va” de Alberto Cortez, logrando emocionar no solo a su coach, sino también al resto del jurado y al público presente.
Desde los primeros acordes, la presentación de Burgos Espinoza y Posat se destacó por su profunda carga emocional. Con voces maduras, llenas de experiencia y sentimiento, ambos participantes lograron transmitir el dolor, la nostalgia y la reflexión que encierra la letra del tango.
La química entre ellos fue tan intensa que, como expresó Oscar Burgos, “la emoción del tema que compartimos nos impidió un poquito ser competencia”. Más que un duelo, fue una entrega conjunta de arte y sensibilidad.
Fuente: La Voz Argentina
La interpretación fue tan poderosa que Soledad Pastorutti se mostró visiblemente conmovida. En su devolución, evitó tecnicismos y se centró en el valor humano de la actuación: “Lo que hicieron es darnos una lección. No vinieron a mostrar lo bien que cantaban, vinieron a demostrarnos que letras como esta solo las pueden cantar personas que han sabido vivir y que han tenido golpes en la vida”, expresó con lágrimas en los ojos.
La Sole aprovechó el momento para reflexionar sobre el rol de los mayores en la sociedad y en el arte. “Respeto y valoro mucho a mis mayores. Aprendo hasta el día de hoy de ellos. Lamentablemente, en la sociedad de hoy se ha perdido el diálogo de nieto con el abuelo, la sobremesa… y yo la sigo manteniendo con mucha firmeza”, dijo con emoción.
Fuente: La Voz Argentina
Reconocimiento
Este reconocimiento a la trayectoria vital de los participantes fue uno de los momentos más destacados de la noche. La Sole remarcó que sus hijas han tenido la suerte de conocer a sus bisabuelos y que ese vínculo intergeneracional es fundamental para comprender la profundidad de ciertas canciones.
Tras la emotiva presentación, Soledad Pastorutti tomó la difícil decisión de elegir a Rogelio Posat para continuar en su equipo. Sin embargo, la historia no terminó allí. En un giro inesperado, Lali Espósito activó el botón de “robo” y seleccionó a Oscar Burgos Espinoza para sumarlo a su equipo, convirtiéndose en el primer “robo” de la temporada.
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