Jorge Capitanich: “Competir con Trump y Milei es muy difícil”

“Competir contra Trump-Milei es muy difícil y complejo en Argentina”, reconoció Jorge Capitanich. El exgobernador del Chaco y flamante senador por Fuerza Patria analizó el panorama político y económico del país tras las últimas elecciones, y consideró que el peronismo atraviesa un punto de inflexión. “Creo que no estamos interpretando correctamente las nuevas demandas de carácter social”, admitió en Modo Fontevecchia, por Net TV y Radio Perfil (AM 1190).
Jorge Capitanich es contador, empresario y político argentino, perteneciente al Partido Justicialista. Fue gobernador de la provincia del Chaco en los períodos 2007-2015 y 2019-2023. Fue electo senador nacional en el período 2001-2007, cargo que dejó temporalmente para ser jefe de Gabinete de Ministros de la Nación Argentina. En las recientes elecciones fue elegido como senador por el espacio Fuerza Patria.
En 2023, La Libertad Avanza en el Chaco obtuvo 4% de diferencia de votos respecto del peronismo, y ahora, aun si esos mil votos de diferencia se confirmaran que van para la Alianza de La Libertad Avanza, la diferencia sería 0,28. O sea, se redujo notablemente la diferencia con el peronismo. ¿Y a qué lo atribuís?
Esto no les gusta a los autoritarios
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Nosotros hicimos una campaña que para mí fue muy buena y muy positiva. Trabajamos con el diálogo multisectorial, cosa que el oficialismo no tuvo. Y, en segundo lugar, cuando teníamos proximidad y tendencia a ganar las elecciones, creo que competir contra Trump-Milei, todo junto con aparatos electorales, es muy difícil y complejo en Argentina. Pero, objetivamente, creo que también nosotros pudimos galvanizar efectivamente la representatividad del voto que manifiesta disconformidad con la gestión de gobierno. Y ahora me parece que es un punto de inflexión. La historia argentina siempre se dio entre dos polos antagónicos: saavedristas-morenistas, federales-unitarios, liberales-conservadores, peronistas-radicales, peronistas-antiperonistas. Hoy yo diría que son coaliciones políticas dinámicas y cambiantes, pero básicamente están vertebradas sobre esos dos polos.
De manera tal de que esos dos polos tienen hoy una cuestión. La elección de Frente Patria, si uno consolida y a incorpora a otros actores, es una elección que está muy razonable dentro de la línea histórica de los últimos 42 años de democracia en elecciones intermedias. Lo que me parece claro ahora es que hay un punto de inflexión. Acá la exigencia del electorado es que pudo haber votado por miedo en algunos casos, por expectativas en otros, por no ser nosotros fieles intérpretes de las demandas sociales por el otro. Pero, básicamente, ahora viene el punto de inflexión, en el sentido de que se plantean resultados. Y yo creo que Argentina está atravesando dos transiciones que no se debaten seriamente. La primera transición es la transición demográfica. Esta transición demográfica tiene que ver con el bonus demográfico, que se agota en Argentina para el año 2040.
Eso significa reducción de la base piramidal, tasa de fecundidad más baja y, obviamente, mayor envejecimiento poblacional, con un sistema de seguridad social que tiene problemas de financiamiento estructural, y con alta informalidad laboral respecto a aportes y contribuciones. De manera tal que eso hay que discutirlo severamente.
La segunda cuestión es que me parece que hay un problema central de transición de lo que significa restricción externa. O sea, insuficiencia o falta de dólares, a lo que podría devenir en enfermedad holandesa si se multiplican los vectores de minería y minerales estratégicos. Ahora tenemos predominancia de oro, plata, puede expandirse el tema del litio, pero cobre, con nuevos proyectos de inversión, puede generar mayor incremento en la oferta de divisas.
Estamos hablando de 4.000, 7.000, o puede ser 10.000 millones de dólares de exportaciones o más. Pero llegar a 1,5 millones de barriles diarios implica efectivamente aumentar la oferta exportable en casi 31.000 millones de dólares, revirtiendo el déficit energético tradicional de los últimos 15 años en Argentina. De manera tal de que yo creo que ahí hay que plantearse una discusión. Porque vas a tener un esquema de una tendencia a la apreciación cambiaria o a la sobrevaluación cambiaria, y en ese contexto hay que llegar. Con lo cual digo: ahora tenemos dificultades de corto plazo, pero también hay que discutir la cuestión de mediano y largo plazo por una razón muy sencilla: porque eso también puede generar una exclusión social severa. Entonces, yo lo que creo es que vamos a transitar también un contexto de aumento de la tasa de desempleo.
Efectivamente hay sectores que se están resintiendo de una manera espectacular. Vos tenés apertura económica, la competencia de las plataformas tipo Shein, Temu, etcétera. Yo lo veo mucho en el Chaco. O sea, yo les digo a los comerciantes chaqueños: “Ustedes tienen dos problemas. Las personas que tienen ingresos para comprarles a ustedes, compran en Brasil, Paraguay o Bolivia por cercanía, o en Temu o Shein por apertura. Y los que deberían comprarles a ustedes, porque no pueden hacer eso, efectivamente no tienen ingresos”.
Entonces, claramente te aumentan los costos y te bajan los ingresos. Tienden a generar quiebres masivos. O sea, no por nada se está generando el tema de destrucción de pymes, este aumento de la tasa de desempleo y mayor…
Y gana La Libertad Avanza.
Sí. Pero esto es una cuestión transitoria en la política argentina. Los procesos fueron cambiando significativamente. Alfonsín, en 1985, logra la mejor performance en elecciones legislativas a medio término, el 3 de noviembre del año 1985. Cuatro factores: primero, 30 a 2% de tasa de inflación por Plan Austral desde el 14 de junio; segundo, arreglo de acuerdo con Chile; tercero, efectivamente, fortaleza de la democracia inspirada en el liderazgo político y en repudio a la dictadura; y, por último, un gran candidato como era Alfonsín.
Tuviste factores que fueron convergentes hacia una gran elección. Pero después, en el 87, tuviste una derrota masiva en todo el país el 6 de septiembre, y después un cambio de mapa político a partir de 1989, y después sucesivamente cambio. De manera tal de que nada es para siempre en la Argentina. Entonces, esto es muy dinámico. Lo que sí claramente no son dinámicos ni cambiantes son los polos. Esto depende de cómo se articulan los polos antagónicos y quién los lidera.
Los mandriles siguen ahí (y ahora los maneja Milei)
¿Qué sentís cuando escuchás al gobernador de Salta quejarse de que desde Buenos Aires quisieron imponerle candidatos, que intervinieron el partido? ¿Qué sentís cuando hay las críticas a las peleas internas y a la conducción nacional del PJ?
Tenemos que hacer un balance desde el punto de vista de lo que significa un salto cualitativo como partido, movimiento o expresión, movimientista nacional. Tenemos que dejar de lado la confederación de partidos provinciales para elegirnos en un proyecto nacional, popular y democrático. Y esto, creo, que estamos ante un debate en ese sentido. Tengo muy buena relación con todos los dirigentes y siempre respeto la opinión de todos. Pero creo que Gustavo Sáenz ha tenido una posición periférica al justicialismo. O sea, él no puede definitivamente cuestionar, en este sentido, al justicialismo, porque no forma parte de las entrañas mismas. Fue Frente Renovador, estuvo también en Juntos por el Cambio. O sea, es un dirigente político que tiene raigambre popular, pero definitivamente me parecen desacertadas sus declaraciones. Pero, digo, dentro del marco de afecto que le tengo, digamos.
Pero en ese contexto, lo que quiero decir es que también, hacia el año 2027, nosotros, como espacio político, tenemos que plantearnos tres exigencias básicas. Primero: si nosotros no tenemos una primaria abierta, obligatoria y simultánea que sea capaz de dirimir liderazgo, no tenemos posibilidad en el 2027. Porque la condición necesaria para nosotros es la unidad, pero la unidad es en la diversidad. Segundo: si nosotros no tenemos un programa de gobierno sólido, o sea, un acuerdo programático, tampoco tenemos garantía efectivamente de poder plasmarlo. Y tercero: tenemos que ser capaces de discutir con la sociedad y, obviamente, tener cuadros políticos y técnicos que impliquen cuadros de gobierno. Entonces, este, sinceramente, eso significa para nosotros tener una nueva perspectiva de conjugación policlasista en la composición política.
¿Y qué significa eso para vos?
Hoy estamos en una postura más reduccionista de preservar lo que tenemos, y esto es lo que nos impide tener capacidad de construcción de poder. Entonces, ¿cuáles son los puntos que deberíamos discutir nosotros? Primero, tamaño y optimización del Estado, eficiencia, sensibilidad; o sea, el tema de las capacidades estatales hay que discutirlo claramente. Y el rol del Estado es muy claro. Segundo: ¿eso significa, para nosotros, discutir el tema de privatización sí o no? Bueno, yo creo que hay empresas públicas que son estratégicas, que forman parte de la capacidad de acumulación de capital y del desarrollo y la productividad de los factores. Pero otras no, con lo cual hay que discutirlo.
Tercero: desregulación o regulación. El Estado no puede regular todo ni tampoco desregular todo. Creo que es un tema que se tiene que discutir por ley del Congreso, no por decreto de necesidad y urgencia impuesto por un funcionario iluminado de turno. Tiene que haber reglas claras y precisas hacia adelante. Otra cuestión: apertura económica. No cabe la menor duda de que la inserción de la Argentina en el mundo global requiere un mecanismo de incorporación de Argentina al mercado mundial.
La impunidad con la que Milei se maneja después del triunfo
Ahora bien, esa apertura tiene que ser gradual, conforme a normas regulatorias que te permitan acompañar la productividad de los factores. O sea, si vos tenés mayor modelo de acumulación de capital, mayor nivel de inversión bruta interna generás apalancamiento de la productividad de los factores, efectivamente la apertura tiene que ser congruente con todo. Ahora, si vos empezás al revés y decís: “Bueno, apertura indiscriminada”, quebrás todas las empresas. Eso es un valor intangible: destruís capacidad empresarial, trabajadores, etcétera, etcétera.
Entonces, yo creo que eso es un tema clave. Pero también nosotros tenemos que entrar en un mundo muy complejo. O sea, primero, yo creo que hay que discutir efectivamente la reforma laboral en términos de la informalidad, los problemas que eso genera, los problemas del sistema previsional y, bueno, vamos a tener mayor envejecimiento previsional, pero ¿cómo lo financiamos? Ahora, no a través de un proceso de exclusión, como pretende el liberalismo libertario. De manera tal de que esto no es un problema de blanco o negro. Hay muchas cuestiones que deben ser susceptibles de debate.
¿Y qué autocrítica hacés a las derrotas que acumuló el peronismo?
Creo que no estamos interpretando correctamente las nuevas demandas de carácter social. Y, si bien preservamos efectivamente nuestros principios desde el punto de vista de la defensa de los intereses del pueblo trabajador, lo cierto es que la informalidad te está cambiando el paradigma de las relaciones políticas, sociales y productivas. De manera tal de que eso nos exige un nuevo debate. No hay una solución única a los problemas múltiples, pero sí creo que requiere un abordaje desde el punto de vista plural y democrático del debate.
Comenzó ayer exactamente el juicio por el femicidio de Cecilia Strzyzowski, que durante la campaña del 2023, me parece que fue el punto clave que llevó a tu derrota allí. ¿Qué expectativas tenés? ¿Qué tenés para decirle a la audiencia respecto de aquello que sucedió?
Primero, que la Justicia actúe con todo el peso de la ley, que se haga justicia porque eso fue un dolor muy grande para la sociedad chaqueña y una cuestión personal también. Y eso, obviamente, ha incidido injustamente en el resultado electoral. Y, en tercer lugar, que el juicio por jurados se haya instalado en la provincia del Chaco a través de una iniciativa legislativa de nuestro gobierno. Entonces, en la provincia del Chaco existe juicio por jurado en materia penal, civil y comercial. Es una innovación, y creo que no me cabe la menor duda de que el fallo deberá ajustarse a derecho y, naturalmente, los culpables y responsables de tan horrendo crimen merecen toda la condena.
¿Y qué expectativas tenés de que el juicio termine demostrando qué relación tenías vos con el padre del supuesto asesino?
A ver, los movimientos sociales, a través del sistema cooperativo, desarrollaban múltiples actividades: construían viviendas, desarrollaban actividades productivas, y el Estado tenía una relación vinculada a transferencias de recursos y rendición de cuentas. O sea, no hay irregularidades. Lo que hay, sí, efectivamente, es parte de una conducta que no tiene nada que ver con el rol del Estado, absolutamente. Son conductas de carácter individual.
¿Qué pasa hoy en la provincia del Chaco respecto al tema de femicidios?
Se han incrementado de una manera extraordinaria. Pero eso también forma parte de un retiro por parte del Estado en el rol preventivo. De manera tal de que, para nosotros, fue algo tremendo. Te podés imaginar que nuestra gestión fue la primera vez que una vicegobernadora ocupó el cargo en la fórmula gubernativa. Teníamos paridad de género, construcción de refugios, políticas de género en materia presupuestaria, con perspectiva de género y, también un nivel de abordaje multidisciplinario de esta problemática compleja. Y finalmente tuvimos un episodio de esta naturaleza, o sea que realmente es repudiable y nosotros siempre lo repudiamos.
RM/MU
