Jair Bolsonaro, de 70 años, fue trasladado de urgencia a un hospital en Brasilia tras sufrir una descompensación mientras estaba bajo arresto domiciliario. Lo confirmó su hijo, el senador Flávio Bolsonaro, a través de la red social X, detallando que presentó una fuerte crisis de “hipo, vómito y presión baja”.

El parte médico fue aportado por Claudio Birolini, jefe del equipo de Bolsonaro, quien señaló que la internación era necesaria para realizar una “evaluación clínica, medidas terapéuticas y exámenes complementarios”. Antes del episodio, el domingo había sido sometido a exámenes médicos y al tratamiento de lesiones cutáneas, además de detectársele un cuadro de anemia y señales de neumonía reciente.

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Bolsonaro cumple arresto domiciliario, después de haber sido condenado a 27 años de prisión por el intento de golpe de Estado tras perder las elecciones de 2022 frente a Luiz Inácio Lula da Silva. Según la Corte Suprema brasileña, el fallo por golpismo debe concretarse una vez se publique oficialmente la sentencia y se resuelvan posibles recursos.

Este no es el primer episodio de salud grave en lo que va de su arresto. Bolsonaro ya había sido hospitalizado recientemente para la extracción de lesiones cutáneas que estaban siendo estudiadas, y los exámenes previos mostraron anemia, debilidad general, y secuelas del intento de asesinato que sufrió en campaña en 2018.