Escándalo en el edificio de Úrsula Corberó: la actriz explotó y apuntó contra un vecino


Úrsula Corberó atraviesa uno de los momentos más tiernos de su vida privada con su embarazo. La actriz internacional, conocida mundialmente por su papel como “Tokio” en La casa de papel, fue víctima de una situación con un vecino: la grabó en un restaurante sin su permiso, y el video terminó recorriendo todos los portales del país.

La información fue revelada en el programa Implacables, donde los panelistas detallaron cómo se desató el escándalo. “Grabaron a Úrsula mientras estaba comiendo tranquila, sin saber que quien la filmaba era un vecino del mismo edificio”, contaron en el ciclo.

El hecho ocurrió en el restaurante privado del edificio donde la artista vive. Según explicaron en el programa, la actriz se encontraba allí con un grupo reducido de amigos, disfrutando de una cena íntima. “Uno de los portales más importantes del país subió el video con total inocencia, creyendo que se trataba de un restaurante común”, detallaron.

Sin embargo, lo que nadie sabía era que se trataba de un espacio exclusivo para residentes, lo que hizo estallar a la actriz al descubrir la filtración. En Implacables aseguraron que Corberó no se quedó de brazos cruzados. “Pidió la cabeza del vecino”, afirmaron al aire, subrayando que la intérprete española exigió medidas inmediatas contra la persona responsable de grabarla.

El video, que circuló brevemente en redes sociales, mostraba a la actriz riendo y conversando, completamente desprevenida. En pocas horas, se volvió viral y generó una ola de comentarios. Mientras muchos usuarios criticaron la invasión a su privacidad, otros debatieron sobre el límite entre la fama y la vida personal.

“Ella está indignada, no lo puede creer. Se sintió vulnerada en su propio espacio, y eso la descolocó completamente”, agregaron en el programa. La furia de Corberó no solo apunta al vecino que tomó las imágenes, sino también a los medios que reprodujeron el video sin verificar su origen.

El escándalo deja al descubierto una vez más los peligros de la exposición mediática y las redes sociales, incluso para quienes intentan mantener su vida privada bajo llave. Y en el caso de Úrsula Corberó, la traición vino de donde menos lo esperaba: la puerta de al lado.

 



Source link

Compartir