El principio científico que permite convertir tu ventilador en un aire acondicionado este verano
Cuando llega el calor y el uso de un aire acondicionado parece inevitable, tal vez convenga reconsiderar esa opción: con un ventilador bien ubicado —y con un truco sencillo y económico— podés lograr que el aire circule con frescura real, sin necesidad de encender el equipo de refrigeración.
En temporadas de altas temperaturas, este método no solo puede aliviar tu ambiente de forma eficaz, sino también bajar el consumo eléctrico que genera mantener el aire acondicionado encendido.

La clave está en emplear un principio básico de física: el enfriamiento evaporativo. Al colocar un recipiente con hielo o botellas congeladas frente al ventilador, el aire que pasa cerca del hielo pierde temperatura, y ese flujo más fresco se reparte por la habitación.
El ventilador, entonces, ya no solo mueve aire caliente —como suele suceder por sí solo— sino que impulsa una brisa “refrescada”, brindando una sensación similar a la del aire acondicionado.
Para que esta técnica sea efectiva, conviene además considerar algunos detalles del espacio: mantener ventanas y puertas cerradas durante las horas de máximo sol, bajar persianas o cortinas, y evitar fuentes de calor innecesarias. Así se reduce la entrada de calor y el ventilador puede distribuir mejor el aire fresco generado por el hielo, optimizando su efecto.

Este truco se vuelve especialmente útil en casas o departamentos sin aires acondicionados, o cuando se busca reducir el consumo de energía. Además, el ventilador —al contrario del aire acondicionado— no suele resecar tanto el ambiente, lo que puede resultar más saludable para quienes viven en climas cálidos.
En definitiva, si querés mantener tu casa fresca sin depender del aire acondicionado, un ventilador combinado con hielo o agua fría puede ser una solución práctica, económica y sorprendentemente eficaz. Solo requiere un poco de previsión: hielo, un ventilador y una buena distribución del aire pueden transformar cualquier habitación calurosa en un espacio más agradable.
