Tras el ataque iraní con misiles contra bases estadounidenses en Qatar e Irak, Trump tardó aproximadamente tres horas en responder en su red Truth Social. En un mensaje que desató repercusiones, dijo: “Irán ha respondido oficialmente… con una respuesta muy débil, que esperábamos y contrarrestamos muy eficazmente… Me complace informar que ningún estadounidense resultó herido… Quiero dar las gracias a Irán por avisarnos con antelación”. Su publicación destacó el derribo de 13 de los 14 misiles y la inutilidad del ataque.

La reacción de Trump pareció apuntar a calmar las aguas, al afirmar: “Tal vez Irán pueda ahora proceder a la paz y la armonía en la región, y animaré con entusiasmo a Israel a que haga lo mismo… ¡Felicitaciones, mundo! ¡Es tiempo para la paz!”.

Iran has officially responded to our Obliteration of their Nuclear Facilities with a very weak response, which we expected, and have very effectively countered. There have been 14 missiles fired — 13 were knocked down, and 1 was “set free,” because it was headed in a…

— Trump Truth Social Posts On X (@TrumpTruthOnX) June 23, 2025

Al mismo tiempo, Trump repasó los daños infligidos por los ataques estadounidenses a instalaciones nucleares iraníes, acusando a los medios de difundir “Fake News” y asegurando que las instalaciones fueron “totalmente destruidas”. Sin embargo, el Wall Street Journal y The New York Times informan que el presidente mantiene abierta la opción de nuevos ataques militares, aludiendo que “podría hacerlo o podría no hacerlo”.

Este mensaje dual revela su estrategia: exhibir fortaleza militar y, al mismo tiempo, proyectar prudencia. Aunque sin confirmar una respuesta activa, Trump subrayó la eficacia del sistema de defensa y su disposición a respaldar una desescalada si Irán aporta señales.

La crisis se mantiene abierta: mientras Irán advierte que sólo un ataque estadounidense llevaría a represalias mayores, y EE.UU. envía fuerzas y mantiene vigilancia máxima, Trump abre canales diplomáticos.